- Elizabeth Camaño
- 14 oct 2022
- 2 Min. de lectura
¿Has si golpeado por perder a alguien o algo en tu vida?
Si no lo has vivido quiero decirte que es algo duro y triste pero que en medio de lo que sea hay una manera efectiva de afrontarlo y es con Dios.
Si hablamos de la pérdida de un ser querido creo firmemente que nadie está preparado en su mente para asimilar esto, PERO hay algo más fuerte y es que tu espíritu, si está conectado con Dios siempre estará preparado. ¡Y eso he venido a contarte mi experiencia por lo que he vivido!
Si no sabes, hace un mes perdí a mi mamá fue un derrepente nadie lo esperaba. Fue algo difícil. No vengo a decirte que no me dolió, ¡si me ha dolido y bastante!
En lo que me quiero enfocar es como Dios preparó mi espíritu para ese momento. Nunca me imaginé mi vida sin mí mamá.
La oración e intimidad con Dios ha sido la fuente de mi fortaleza. El entender que esta vida es pasajera y que todos de algún modo vamos a partir. Pero mi único consuelo ha sido; que mi mamá se fue con él y que hoy está en un mejor lugar.
Cada día estoy más convencida que pasar tiempo con Dios es la mejor inversión. Ese momento nos prepara para enfrentar lo que es aparentemente "malo" y disfrutar lo que aparentemente "bueno".
La fortaleza que tengo hoy no vino de hace un mes, ha sido construida desde mucho tiempo atrás en mi intimidad con Dios.
Ese dicho de que "si tienes a Dios, nada malo te pasará" no es tan real pero si te puedo asegurar que SI TIENES A DIOS, NADA TE DERRUMBARÁ. Lo que viví no me hace cuestionar a Dios sino que el recuerdo de lo sucedido me hace amarlo más.
Así que, es tiempo de aprender a relacionarte verdaderamente con Dios.
Comments